Militar. Nació en Petatlán en 1788; murió cerca de San Jerónimo el 24 de abril de 1830. Realista durante la Guerra de Independencia, a partir de 1827 tomó línea en favor de los revolucionarios surianos.
Realizaba actividades comerciales y agrícolas cuando estalló la insurgencia. El 1 de noviembre de 1810 ingresó como soldado a la V División de Milicias del Sur. El 10 del propio mes participó en el combate de Piedras Pintadas. Debido a sus méritos en campaña, a principios de diciembre ascendió a cabo segundo. El día 13 estuvo en el ataque contra el campamento de Paso de La Sabana, en cuya acción obtuvo el triunfo el cura José María Morelos y Pavón sobre los realistas Francisco Paris, José María Sánchez Pareja y Francisco Rionda.
Dos días después sería ascendido a cabo primero. Padeció de nuevo la derrota en Tres Palos, en la noche del 4 de enero de 1811, cuando Paris fue sorprendido por el comandante rebelde Julián de Ávila. No obstante, mereció el estímulo de sus superiores, toda vez que el día 15 de aquel mes y el 1 de febrero siguiente fue promovido a sargento segundo y sargento primero, respectivamente.
Junto con las tropas dispersas de Paris, el 18 se incorporó en Las Mesas a las fuerzas del sargento mayor Nicolás de Cosío. El 19 de marzo estaba con Paris en Puerto Marqués y participó en las operaciones contra Morelos. El 11 de mayo entró a la Hacienda de San Marcos, con lo que concluye su accionar realista por la región de la Costa Chica.
Combatió en Zitlala el 4 de junio de 1812 contra los ejércitos comandados por el general Hermenegildo Galeana. Después pasó de servicio a Juquila y el 4 de octubre mereció despacho de subteniente de Infantería; tras lo cual, el 1 de agosto de 1813, asciende a alférez de Dragones. Incorporado a la división mandada por el general José Gabriel de Armijo, el 21 de enero de 1814 tomó parte en el ataque contra los insurgentes que impedían el paso en el río Mezcala.
El 17 de febrero participó al lado de Armijo en la batalla victoriosa de Chichihualco, que enfrentó a las huestes mandadas por el licenciado Juan Nepomuceno Rosains. Después, en el punto conocido por Sierrecilla, mandó a un contingente realista que consiguió la victoria, por lo que fue ascendido a teniente el 29 de noviembre de 1814. Pasó luego en comisión de servicio a la Costa Grande y militó a las órdenes del capitán Marcos Pérez.
Con el contingente de éste último, partió de San Luis el 16 de febrero de 1815, y en el rancho de El Pedregal contendió duramente, contribuyendo a la derrota del insurgente Desiderio Mayo.
Por ese entonces expedicionó y luchó por el rumbo de su tierra natal hasta obtener el despacho de capitán graduado, con fecha 25 de abril de 1817. El 11 de febrero y el 3 de marzo de 1818 se enfrentó a los insurgentes en Cutzamala y el 17 de abril atacó el cerro fortificado de Barrabás.
Dirigió una partida en la acción del 3 de mayo del mismo año, verificada en el punto llamado El Reparo, en la región calentana del estado. Su actuación le fue reconocida y por ello el 11 de septiembre de 1819 es nombrado capitán efectivo. Durante los días 3, 4 y 6 de octubre siguientes intervino en el asalto realista sobre el pueblo de San Gaspar para ser designado capitán del Escuadrón Segundo de Caballería Provincial de la Reina Isabel el 11 de noviembre de 1819.
Al triunfo del Plan de Iguala, en 1821, dejó la milicia y se consagró a la labranza en Petatlán, donde llegó a hacer buenas migas con el general Isidoro Montes de Oca, que se convirtió en el factótum de la región. Cuando los costeños proclamaron la expulsión de los españoles y se creó la Columna de la Libertad, el 21 de diciembre de 1827, fue nombrado segundo comandante de esa fuerza armada.
En el segundo contexto de la campaña antiespañola, el 7 de enero de 1828, se hallaba en Venta Vieja con el carácter de segundo jefe del Batallón de Zacatula, mandado por el teniente coronel Cesáreo Ramos. Del 22 de febrero al 18 de septiembre desempeñó el cargo de comandante militar de Acapulco, en ausencia del general Isidoro Montes de Oca. El 16 de noviembre era teniente coronel y en el puerto secundó a este último en su movimiento de expulsión de españoles. El 22 de ese mes recibió el archivo de la guarnición del puerto, por entrega que le hizo el coronel José Pita. El 9 de diciembre de 1828 ocupó nuevamente el cargo de comandante militar de Acapulco, hasta julio de 1829, cuando se trasladó a Petatlán. En unión del coronel Francisco Marcos Mongoy y el capitán Jacinto Gallardo se pronunció contra los peninsulares y exigió que fueran expulsados del país.
El 1 de febrero de 1830 incursionó por la Costa Grande, haciendo proselitismo a favor del presidente derrotado Vicente Guerrero. Como comandante del Batallón Activo, el 9 de marzo tenía órdenes del general Montes de Oca para incorporársele en Petatlán, con los soldados de Tecpan y San Luis. El 14 de dicho mes sostuvo en San Jerónimo una conferencia con el coronel Juan Álvarez y el día 22 se dirigía a Acapulco juntamente con Montes de Oca y Francisco Marcos Mongoy, pero en un punto del camino se puso a las órdenes del coronel Álvarez, quien se había declarado sostenedor del gobernante depuesto. A su lado contendió el 24 de abril de 1830 contra las huestes expedicionarias del general bustamantista Nicolás Bravo, con tan mala fortuna que pereció en la disputada batalla.
(JMLV/BM)