Pintor. Nació en el Hospital de Jesús de la Ciudad de México el 24 de septiembre de 1931. Estudió en la Escuela Nacional de Pintura, Escultura y Grabado La Esmeralda del INBA; sus maestros fueron Enrique Assad, Ignacio Aguirre y Carlos Orozco Romero. Es pintor profesional desde 1955.  La trascendencia del trabajo que realiza surge a raíz de su búsqueda por crear nuevas propuestas artísticas, característica que en su obra se hizo notar desde un principio al romper con la tradición del muralismo mexicano, por lo que se le considera uno de los máximos exponentes de la generación de la ruptura.

La importancia de Gilberto Aceves Navarro como artista se ha hecho evidente en su participación dentro de las bienales de París (1961, 1963 y 1965), Tokio (1962) y México (1960 y 1962). Asimismo ha realizado exposiciones individuales y colectivas en México y Estados Unidos, con lo que se acredita su figura de talla internacional.

Su quehacer artístico no sólo lo confirma en su obra, sino que también ha desarrollado una importante labor docente en el Instituto de Intercambio Cultural Mexicano Norteamericano en Los Ángeles, California, de 1957 a 1961; en la Escuela Nacional de Artes Plásticas, Academia de San Carlos, de 1971 a la fecha, y en su Taller de Dibujo “Aceves Navarro”, desde 1998. Su enseñanza se basa en fomentar en los alumnos una visión nueva para creaciones nuevas; el romper los esquemas y paradigmas resulta esencial en su instrucción.

Estilísticamente, este artista ha incursionado en el realismo, el expresionismo, la abstracción y la figuración, caminos que lo revelan como un artista completo y de gran madurez que no sólo busca y experimenta, sino que estudia, profundiza y desarrolla. Una de las características de su estilo es la obra en series, mismas que surgen como un intento de expresar un tema en toda su extensión. Sus composiciones adquieren alto dinamismo gracias al manejo libre de la luz, el color, así como a los contornos sinuosos.

Tres delicadas paseando. Año 2005. Acrílico/tela.

Como parte de una larga pero incesante trayectoria creativa y reflexiva su obra se presenta como una forma comprometida de hablar y denunciar los crueles e injustos sucesos del mundo actual (las guerras y el sistema capitalista en su época del imperialismo, entre otros). La visión como artista maduro le permite utilizar los planteamientos plásticos más adecuados a su aparato crítico. De esta manera, este reconocido autor les da vida a sus trabajos para estimular en el espectador una visión analítica y hacerlo meditar acerca de su contexto. En pocas palabras, encuentra en su arte y propuestas plásticas una función humana y social.

En 1953 colaboró con el pintor Luis Arenal en la realización de los murales del Palacio de Gobierno de Chilpancingo. En 1955 realizó su primera exposición individual (“Energía dirigida”) en la que expone óleo y obra sobre papel en la Galería Nuevas Generaciones INBA, México, D. F.

Fue docente en el Instituto Regional de Bellas Artes, Acapulco, Guerrero, México, hasta 1957.

Es un prolífico artista con exposiciones en diferentes países como México, EU y otros de Europa.

(JMLV/JGCL/EAV)